En el interior de la provincia de Alicante, mandabacalor, las temperaturas posiblemente no eran para
ascender a ningúna montaña, aunque el premiolo tuviera en la cima, así que decidí vistar la zona
de Javea, que tanto buenos recuerdo guardo.
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El fresco sendero animaba a caminar, las brisas del mar y las vistas que por cualquier lugar se veían, iba a hacer una magnifica ruta unida a la magnifica mañana, un grupo de personas extranjeras nos cruzamos en varias ocasiones, finalmente decidí unirme a ellos y ser su guia por éstas calas escondidas. El Portichol, El Cabo la Nao, La Granadella y el Cabo San Antonio.
Ya entrado en mediodía, la temparatura subió, las gorras, gafas, agua y otros protectores no impedía sentir el fuerte calor que sentiamos en las subidas que aunque no pronunciadas, sí exigían un esfuerzo, atajamos por unos collados para llegar en menos tiempo a la playa de la Granadella y refrescarnos.
Las aguas limpias, claras y frescas de la Playa de la Granadella, relajó nuestras piernas que no por la distancia recorrida, pero sí por cansancio necesitaban éste refresco. Sobre todo para Draco que no quería salir del agua, se lo merecía, los seis o siete kilometros le hacían sacar un palmo de lengua.Para él una buena sombra y agua fué el descanso, después algo de arroz que le guarde.
Para nosotros una paella, acompañado de sangría, fué el premio que recibí por acompañar a estos nuevos amigos, los correos electrónicos y teléfonos se intercambiaron, el próximo mes de mayo
hemos quedado para hacer algo por el interior de Alicante.
Good Luck,¡ para mí y Good boy ¡ para Draco, puso fín a un encuentro agradable con unos nuevos amigos procedentes del frio, Suecia.
